Mi año de Fe
Gracias Dios por
todas tus bendiciones, estaba sin un sol en el bolsillo, con todas mis batallas
perdidas, con mi pierna desgarrada sin poder trabajar, y tù en tu misericordia
me has dado el tiempo más hermoso con mi familia, se curo mi pierna y lo mas
importante mi corazón.
Este año comenzó en
el nacimiento de mi hermosa hija Amira, lo cual nos lleno de una felicidad
tremenda, mas todo se desequilibro, y comencé a perder mis batallas.
La muerte de mi
padre aun dejaba su herida, y la condición de mi madre la ahondaba aun más.
Había una depresión
que no se iba.
1-El proyecto de
cultura viva comunitaria, trato de abrir un espacio independiente a la municipalidad
de lima, para mí esto era muy importante, pero al final la municipalidad
manipulaba todo el proceso, yo denuncie esto,
y a nadie le importo, a mi generación le importa un comino el sentido,
la dignidad, la independencia, quieren plata.
2-En el colegio
de mi hija, sacaron a la directora, de la peor manera a espaldas de los padres
de familia y por un interés de poder, yo denuncie esto y a nadie le importa
nada, fui víctima de un super bulling, y encima a las que armaron el complot
las premiaron.
3- Teresa mi amor
ya estaba harta, los problemas económicos eran cada vez más fuertes en la casa
y nuestra relación de verdad estaba en peligro.
4-Teatro loco
resultaba ser una construcción mía a la cual nadie podía acceder, mi
ontoteologia creativa de la liberación, el arte del biotejido, el comunismo
complementario, no eran más que unas ideas sin experiencia que las sustente, el
Evangelio de la Matria Equivoca no logro recrearse. A pesar de que mi trabajo
personal en biotejido llego a una
madurez.
Y entonces tu
actuaste y me hablaste contestaste mis oraciones, pero lejos de solucionar mis
problemas me hiciste más vulnerable.
Y yo con esa
sensibilidad fui de jurado a un concurso
de teatro Escolar y lo disfrute tanto,
para al final ser sacado sin derecho a Defensa, a las justas logre que me
escucharan, de una manera formal, y mi amigo en el que confié no me defendió y
avalo la injusticia.
Eso desato mi ira
de una manera terrible, camine noches y días para no hacer daño a nadie y al
final trabajando me desgarre la pierna.
Y asì tu
empezaste a curarme, tenía que reconciliarme con mi madre, con mi matria con mi
abuela con mi familia, arreglar mi primer tejido de vida.
Hice el Ulises
con Robert dedicándoselo a Teresa.
Y me fui a
Arequipa gracias principalmente a mi Hermana, en su hijo de alguna manera encontré
a mi padre, gracias Dios Santo.
No pude abrazar a
mi madre, pero lá deje de juzgar, abrace a mi abuela, a pesar de todo, la
abrace sinceramente.
Y a mi hermana a
mi amada hermana, hecha una madre feliz.
No encontré el
abrazo soñado con mi hermano, pero lo encontré a èl, y comprendì un poco màs
No pude hacer
nada en Arequipa me dedique a mi familia, me Reencontre con Teresa, ame a mis
hijos, jugamos, compartimos, recibe el amor de mis Tias, cada una a su manera y
de mis primas.
Gracias Dios
santo por este tiempo gracias Señor, ahora me encuentro bien dispuesto a dar
batalla, con el corazón tranquilo, y con una fe en ti mucho más grande Maestro.
SUBELE UNA NOTA A LA EMOCION
AMADO HERMANO
Entonces hermanito, quedara en ti el niño
Y me volverás a ver inmenso e inútil
Te reirás de mí,
Yo te veré gordito y llorare por ti
Y juntos entre juegos
Nos podremos comer el mundo.
Pero aun así, para mí no será suficiente
Así que subiré una nota más a la emoción
Regálame tu única rana, dale a mi mujer
Tu último peluche, espíala desnuda
Y ahora llora porque no se prestarte atención.
Te prometo que hoy si me daré cuenta
Y beberé de tu copa.
Más subámosle aun una nota más a la emoción
Y yo gritare al cielo con toda mi garganta y mi vientre
¡HERMANO! ¡HERMANO! Y tú gritaras conmigo
abriendo los brazos, prenderas tu música a todo volumen
Y danzaremos juntos, nadie nos podrá quitar esta alegría.
Si, para realmente conocernos
Es necesario subirle otra
Nota a la emoción.
Aquí saldrá a relucir la envidia por mi madre
Te pediré que me devuelvas cada beso que
Ella deposito en tu carne
Que me des todos los abrazos que mi madre
te entrego aun esos que están llenos de locura.
No, no terminara ahí, aun mi corazón
tolera mayor intensidad así que te sacare tu egoísmo en cara,
te culpare por la muerte de mi padre,
maldeciré el día que naciste,
acaso no estábamos bien mi hermana y yo
acaso no éramos felices.
Tú sobrabas.
Y a ti no te quedara otra que molerme en tus manos
No dirás nada, no te atreverás a acusarme
Por la enfermedad de mi madre,
No me dirás de tus días de dolor y de angustia
cuando esperabas mirando por la ventana mí regreso.
Ni me dirás lo mucho que te hice falta,
Solo patearas hasta cansarte,
Trataras de no dejar aliento de vida,
pero pararas en el último instante
para subirle una nota más a la emoción.
Y por fin hermano amado será el abrazo.
Escrito para Cesar Salomón Franco Delgado.
SUBELE UNA NOTA A LA EMOCION
AMADO HERMANO
Entonces hermanito, quedara en ti el niño
Y me volverás a ver inmenso e inútil
Te reirás de mí,
Yo te veré gordito y llorare por ti
Y juntos entre juegos
Nos podremos comer el mundo.
Pero aun así, para mí no será suficiente
Así que subiré una nota más a la emoción
Regálame tu única rana, dale a mi mujer
Tu último peluche, espíala desnuda
Y ahora llora porque no se prestarte atención.
Te prometo que hoy si me daré cuenta
Y beberé de tu copa.
Más subámosle aun una nota más a la emoción
Y yo gritare al cielo con toda mi garganta y mi vientre
¡HERMANO! ¡HERMANO! Y tú gritaras conmigo
abriendo los brazos, prenderas tu música a todo volumen
Y danzaremos juntos, nadie nos podrá quitar esta alegría.
Si, para realmente conocernos
Es necesario subirle otra
Nota a la emoción.
Aquí saldrá a relucir la envidia por mi madre
Te pediré que me devuelvas cada beso que
Ella deposito en tu carne
Que me des todos los abrazos que mi madre
te entrego aun esos que están llenos de locura.
No, no terminara ahí, aun mi corazón
tolera mayor intensidad así que te sacare tu egoísmo en cara,
te culpare por la muerte de mi padre,
maldeciré el día que naciste,
acaso no estábamos bien mi hermana y yo
acaso no éramos felices.
Tú sobrabas.
Y a ti no te quedara otra que molerme en tus manos
No dirás nada, no te atreverás a acusarme
Por la enfermedad de mi madre,
No me dirás de tus días de dolor y de angustia
cuando esperabas mirando por la ventana mí regreso.
Ni me dirás lo mucho que te hice falta,
Solo patearas hasta cansarte,
Trataras de no dejar aliento de vida,
pero pararas en el último instante
para subirle una nota más a la emoción.
Y por fin hermano amado será el abrazo.
Escrito para Cesar Salomón Franco Delgado.