La DIALÉCTICA ETERNA
EL PADRE LE DA EL REINO AL HIJO
EL HIJO GLORIFICA AL PADRE
EL ESPÍRITU SANTO ESTA CON ELLOS EN COMUNIÓN DE AMOR.
EN ESTA DIALÉCTICA NO HAY CONTRADICCIÓN SINO MAS BIEN UNA
COMPLEMENTARIEDAD.
La mejor manera de graficarlo es la imagen del Yin Yan el taijitu el Padre es la parte blanca, él Ser, el
Hijo es el no ser del Padre es su otredad y están en constante movimiento en el
Espíritu Santo, por lo tanto lo que mueve a todo lo que existe es el Amor.
El Padre está
dentro del Hijo y el Hijo está dentro del Padre y ambos los mueve eternamente
el Espíritu Santo que se expresa en una comunión de Amor.
En nuestra realidad
la dialéctica es distinta exige una lucha y constantemente hay contradicciones
pero estas no son ontológicas en sí, la energía sigue siendo energía a pesar de
presentar diversas formas materiales.
Heráclito decía
que uno no se podía bañar en un rio dos veces, pero al mismo tiempo que el río no cambiaba el río no dejaba de ser río.
Es Decir que
la principal dialéctica es la del paso del Ser al No Ser para Ser, ya que el no
ser es la otredad, del ser, la síntesis de ambas sigue siendo el ser en sí
mismo.
El hecho es que en la eternidad ese no es un paso, eso se da, no hay tiempo, o más bien se vive la simultaneidad de todos los tiempos, más en nuestra realidad hay tiempo y espacio, lo cual exige un esfuerzo, una lucha, lo cual es muy distinto a decir de que hay violencia.
La naturaleza no es violenta, simplemente es.
La violencia implica que yo trasgredo la naturaleza del otro,
yo violo.
Y desde su propia palabra implica un juicio moral del que
solo es capaz el hombre.
El hombre viola.
¿Esto quiere decir que el hombre es capaz hasta de violar
las leyes propias de la naturaleza?
Si
¿Aun la de la dialéctica eterna del amor que es la base de
todo lo existente?
El hombre es capaz de
pervertirlo todo, más tarde o temprano, el Ser sana.
Por lo mismo el grave problema de la vida humana está en haber
transgredido la dialéctica del amor, que se basa en el que yo dejo de ser para
que el otro sea y una vez que el otro es
soy y viceversa, así todo realiza el Ser.
Mas el hombre se hace del poder y no deja que el otro sea, él
quiere ser en desmedro de otro, explotándolo, oprimiéndolo, alienándolo.
Y al igual el otro se rebela violentamente, sin saber que al
violentar al otro se violenta a sí mismo, y que el ciclo de la opresión
continuara.
Entonces toca comprender que el otro soy yo y que yo soy en
el otro.
Cuantos conflictos quedarían solucionados si comprendiéramos,
el conflicto del hombre y la mujer, si el Hombre dejara que la Mujer sea, pero
en vez de esto la ha oprimido y ahora la mujer tome el poder de una manera
violenta, con una violencia fina, indirecta que hace daño sobre todo a las
familias, sin llegar a entender que el hombre es mujer y que la mujer es hombre
y que necesitan complementarse; el conflicto con la propia naturaleza si pudiéramos
dejar de ser para que la naturaleza sea, no estaríamos en tremendo problema ecológico,
el conflicto cultural, religioso, entendiendo que en cada religión se revela el
ser, es decir que todos de alguna u otra manera están hablando de los mismo y
que solo falta vivirlo, los conflictos de izquierda y derecha, si pudiéramos
entender que ambas son necesarias, pero que la vida es movimiento y que lo que
está arriba debe de bajar y que lo que está abajo debe de subir, que todo organización
debe de ser tanto vertical como horizontal pero en movimiento por lo tanto lo
vertical se vuelve horizontal y lo horizontal vertical constantemente y que hay
que dejar que esto pase, que esto sea.
Pero para comprender esto es necesario primero aceptar que
Dios está en mí y que yo estoy en Dios y la única manera es negándome a mí
mismo para que Dios sea, y entonces Dios realiza el ser en mí, por medio del
Espíritu Santo, gracias a la redención de Jesucristo, haciéndome Hombre,
Persona, Ser humano, y solo en esa comunión Soy.
Y es a partir de esta experiencia de amor, que puedo ser en
mi prójimo y el en mí.
Porque si no caeré en la violencia, ya que primara mi ego, y
no dejare que el otro realice el Ser y yo tampoco realizaré el mío.
Toca entonces revelar una sociedad donde se realice el ser, lo
libere, lo que toca es revelar el Reino de Dios.
Esta es una misión de
vida que en este mundo se hace de todas maneras política.
Y conlleva a una lucha de clases sin violencia, esta es una
lucha espiritual.
Pero cuando decimos espiritual no nos referimos a algo etéreo,
porque si el Padre es el alma, el Hijo el Cuerpo, el Espíritu es la síntesis de
ambos.
Así es que proponemos un Comunismo complementario, en base a
esta dialéctica de amor.
Donde es necesario
construir una infraestructura comunitaria en biotejido, una superestructura que
tenga conciencia del paso del ser al no ser para Ser y una estructura de Madre
estado, con un estado de Democracia directa que sea la base de una democracia
representativa, con la abolición voluntaria de la propiedad privada y la democratización
del capital.
Pero por sobre todo que todo este hecho en el Espíritu Santo
es decir en la comunión de amor complementaria, que solo la da el Padre por
medio del Hijo y que hace posible el tejido de la vida.
Biotejamonos en Dios los unos con los otros, abracémonos.
El problema es que no todos creen y mucho menos en este
tiempo, pues es hora de evangelizar en una guerra del imaginario, donde el ser
no solo se predique sino sobre todo se revele.
Esto quiere decir que en Dios los Cristianos debemos de
dejar de ser para que los otros sean, es decir debemos de darnos a los otros y
ser en su felicidad.
Pero como somos humanos, es decir seres equívocos, pecadores,
hay que sacarnos la mierda.
Seamos honestos permitámonos odiar.
Esta es solo la otra cara del Amor si somos capaces en Dios
de dar el paso del ser al no ser para Ser.
Es decir si somos capaces de perdonarnos.
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